Torregar

Torregar
«Ego sum Tu»
Museo de Jaén.- Sala Temporales Baja
Paseo de la Estación, 27. Jaén
Del 3 al 15 de de Junio

     La evolución experimentada por Torregar le ha conducido a interpretar la identidad del ser humano a través de la imagen retratada, caracterizada por el binomio retrato-identidad. Desde su ingenua mirada ha transcendido los límites del retrato tradicional buscando nuevos significados a la obra de arte contemporánea. En esta ocasión, el artista nos hace partícipes de las confrontaciones que se establecen entre la búsqueda de la identidad del ser y los rasgos identificativos de nuestra sociedad.

     A través de ensayos fotográficos trata de ver más allá de la mirada cotidiana y de la observación de un objetivo fotográfico, radicalizando la idea de retrato por medio de la descomposición de la imagen. En esta serie, materializa la posibilidad de ser otro, de vivir las experiencias del otro, y, en última instancia, de comprender al otro: Ego sum Tu, es decir, Yo soy Tú.  
    
     Estas fotografías son testimonio de los profundos conflictos de la identidad contemporánea: retratos del proceso social, pluralidad del ser humano, reconstrucciones de una nueva sociedad, y donde la composición de sujetos se produce a través de la fragmentación de sí mismos, en un proceso de deconstrucción como medio fidedigno para la construcción de una nueva visión de la realidad.

     Su centro de experimentación durante el proceso creativo se transforma ahora en un espacio, un lugar donde compartir y mezclar las piezas de un puzle. Un rompecabezas en el que introducir los valores necesarios para educar hacia la integración de los demás. Es la identidad de uno mismo y la de todos: ¿no podríamos reconocer en ellas la extensión de una metrópoli formada por la diversidad de creencias, de lenguajes, de etnias, de costumbres y de culturas?.

     Los conflictos del multiculturalismo se vinculan históricamente a la dialéctica negación del otro, ese otro –indio, cristiano, mestizo- que actualmente coexiste, se mezcla y convive en una misma ciudad, -entendiendo la interculturalidad como la combinación de elementos culturales provenientes de las distintas sociedades-. Pero, ha sido en el paso hacia la postmodernidad cuando la globalización social ha borrado las fronteras entre culturas y donde el ser humano ha pasado de ser solo para convertirse en muchos. Así, en el escenario global y posmoderno se expresa el multiculturalismo como realidad y valor, como también las incomprensibles dificultades para asumirlo. Es, por tanto, necesario conseguir un mayor espacio para la afirmación de la diferencia del otro, asumiendo que la identidad del hombre está formada también por la identidad de los otros.  

Luz Mª Gilabert González